La Ora de Juliana

En 2017 apareció en redes un emprendimiento que le daba un giro distinto a lo que solía ser el servicio de arreglos florales en Colombia. Además de ofrecer bouquets con diseños contemporáneos y mostrarlos con un notable amor al detalle, el sistema funcionaba completamente online e incluía la posibilidad de adquirir una suscripción para recibir bouquets de temporada periódicamente. El rango de productos también traía toda clase de innovaciones: desde tarjetas florales hasta experiencias florales inmersivas.

El nombre del negocio, Ora. Y su creadora, Juliana Bustillo.

Hace poco Ora incluyó nuestra jarra de peltre en su catálogo de floreros. A raíz de eso conocimos a Juliana y quisimos saber más sobre su historia y su idea de negocio. 

¿Juliana, de dónde salió la idea de crear Ora?

Todo comenzó en el 2017 cuando yo estaba pasando por un momento emocional tormentoso: estaba en medio de una tusa y además me estaba sintiendo muy frustrada laboralmente. Iba de trabajo en trabajo... Sentía que tenía una gran capacidad de liderazgo y estrategia que estaba siendo desaprovechada. Le estaba pidiendo a la vida que me diera una señal porque yo sabía que tenía grandes capacidades pero no sabía hacia dónde enfocarlas.

Entonces un día tuve un sueño, una especie de mensaje del universo que me decía que la respuesta era una flor. Me desperté llorando y fui corriendo a donde mi mamá gritándole —¡La flores! ¡Son las flores! ¡Tengo que hacer algo con las flores! Y así empecé…

¿Cómo fue ese proceso de pasar de la idea a la realidad?

Fui muy meticulosa desde el principio: quería que mi modelo de negocio tuviera visión, alcance y que fuera muy diferente a lo que ya existía. Me demoré siete meses en pura planeación: creación de producto, creación de marca, proveedores, logística, domicilios, calidad, contenido para redes sociales, fotografía…

¿Cómo fueron esos primeros días?

En ese momento yo tenía 26 años y vivía con mi mamá. Yo hacía todo: compraba las flores, hacía los arreglitos, atendía a los clientes, llevaba los domicilios, etc.

Empecé operando desde el cuarto de servicio de la casa de mi mamá. El negocio fue creciendo y las flores se apoderaron de la lavandería, después de la cocina, del comedor, de la terraza... Entonces mi mamá dijo —No más, Juliana. Tienes que buscar un espacio propio. No puedes decir que tienes un negocio y no estar aterrizada en la realidad de lo que es pagar arriendo y servicios.

Entonces nos pasamos a una oficina de 60 metros que también se nos quedó chiquita muy pronto. El equipo también fue creciendo, el número de celulares, de computadores…Hoy en día estamos en una casa de 156 metros en Chapinero, tenemos 20 empleados, una van de acarreos y un negocio muy próspero.

¿De dónde viene tu amor por las flores?

Mi mamá casi siempre tenía flores en la casa… y me gustaban la flores en cualquier cosa: en un print, en el forro del celular o en el cuaderno… Pero la verdad al principio no sabía nada sobre las flores: sabía qué era una rosa y un girasol y pare de contar.

Pero, como dicen por ahí, el tiempo crea al maestro. Soy una persona muy determinada y me enfoqué en aprender cada vez más de ese mundo tan vasto de las flores.

¿Cómo ha sido montar una empresa desde ceros?

Ha sido un proceso muy amoroso y abundante. No he tenido muchos obstáculos en el camino afortunadamente. Lo hermoso de montar un negocio es que te lleva a entender y aprender todo lo relacionado a ese mundo: temas financieros, contables, legales, procesos creativos y de diseño, temas de calidad de producto, de estrategias comerciales... Es el verdadero MBA, es una maestría holística. 

Y además he contado con mucha suerte. Creo que eso se debe a que estoy encaminada en mi propósito de vida. Las flores han sido un medio para darme cuenta que tengo grandes capacidades de liderazgo y de estrategia. Las cosas han fluido mágicamente, este negocio siempre ha contado con una ola infinita de luz y abundancia.

¿En qué crees que radica el éxito de Ora?

Para mí hay tres claves de éxito: 1) Creer. Creer en tu proyecto, creer en tu sueño, creer en tu visión. 2) Tener actitud. Es muy importante la forma en que te expresas, te relacionas y vendes. 3) Tener determinación. Este es el ente ejecutador que hace que te levantes por la mañana y hagas que las cosas sucedan.

¿Qué consejo le darías a alguien que está pensando en crear un negocio?

El consejo que le daría a alguien que va a empezar su empresa es que se organice financieramente y que balancee todos los aspectos del negocio.

Yo soy comunicadora y tengo mi lado artístico del cerebro más desarrollado, entonces comencé creando una gran marca y esforzándome en que todo se viera bonito. Como no estudié finanzas, dejé a un lado esa parte… Los primeros dos años yo ni sabía cuánto estaba facturando ni cuántas unidades estaba vendiendo... veía que la plata entraba al banco y ya. Me hubiera gustado tener al principio de mi planeación un capítulo de finanzas y proyecciones. 

¿Por qué pensaste en usar la jarra de Criolla para arreglos florales de Ora?

Porque me gusta que mis productos sean lo más funcionales posible. No me gusta que mis arreglos vengan en una materita cualquiera. Me encanta darle a mis clientes esa posibilidad de que si tu flor se marchitó, te queda una jarra hermosa que puedes usar como jarrón, florero o para servir bebidas.

¿Qué significa el peltre para tí?

El peltre me encanta porque soy una persona muy nostálgica y además me fascinan las artesanías y las texturas colombianas. El look and feel nostálgico del peltre lo tengo muy arraigado porque me recuerda las cosas con las que crecí. Además es un material que físicamente me parece hermoso y útil.